ORGULLO LATINO
Tiempo de lectura: 3 minutosLa historia de Topo Chico: de mito del siglo XV a fenómeno mundial
Desde las reuniones familiares hasta las mañanas después de las fiestas, el agua con gas Topo Chico es un ícono mexicano siempre presente y con una historia fascinante.
Como latino orgulloso tengo un profundo aprecio por la tradición cultural de la comida y su papel en nuestras comunidades. La frase “barriga llena, corazón contento" es un dicho popular que capta a la perfección la alegría y la plenitud que acompaña a la barriga llena.
En América Latina, el almuerzo y la cena son momentos preciados que se deben compartir con los seres queridos. Estas comidas nos unen, fomentan relaciones sólidas y crean recuerdos duraderos.
Crecí en la bulliciosa Ciudad de México, donde los domingos a menudo se pasaban en la casa de mi abuela.
Mis hermanos y yo jugábamos con nuestros primos durante horas y horas, mientras los adultos conversaban y se ponían al día. Lo más destacado del día siempre fue el almuerzo, se servía una abundante comida para que todos disfrutaran.
La mesa nunca estuvo exenta de una variedad de bebidas, que iban desde aguas saborizadas hasta Coca-Cola; sin embargo, ninguna se quedó más en la memoria que el Topo Chico.
El mito de Topo Chico
Cuando entras a una casa de latinos o asistes a una celebración, es muy probable que en la mesa encuentres una botella de agua con gas Topo Chico.
Esta marca, orgullosamente mexicana, se ha convertido en un elemento esencial en la comunidad. Es conocida por su sabor distintivo y su historia única.
El nombre Topo Chico se originó en la montaña Cerro del Topo Chico cerca de un manantial en Monterrey, México, donde la marca obtiene su agua; no obstante, la verdadera historia detrás de Topo Chico radica en su logotipo original, arraigado en la leyenda azteca que data del siglo XV.
Cuenta la historia que cuando la hija del emperador azteca Moctezuma I enfermó, un sacerdote le recomendó visitar un manantial termal cerca del Cerro del Topo Chico. Se dijo que la niña se curó instantáneamente después de beber y bañarse en el agua.
Este mito ha contribuido a la creencia de que Topo Chico tiene varios beneficios para la salud, lo que no está lejos de la realidad. El agua con gas contiene minerales como magnesio, potasio y manganeso, que ayudan en la digestión, la función renal y el metabolismo óseo. En México, también se conoce comúnmente como una cura para un mal de cruda (resaca).
Cómo Topo Chico se convirtió en un fenómeno mundial
Topo Chico ha recorrido un largo camino desde sus humildes comienzos en la base del Cerro del Topo Chico en Monterrey. Su historia es de perseverancia, trabajo duro y el espíritu inquebrantable del pueblo latinoamericano. Ha resistido la prueba del tiempo contra viento y marea.
En sus primeros años, la compañía enfrentó una buena cantidad de desafíos debido al clima político incierto y a la Guerra Civil Mexicana.
Con determinación y una ética de trabajo incansable, la marca logró no solo sobrevivir, sino también crecer y expandirse. Para la década de 1930, Topo Chico ya estaba causando sensación como la primera empresa embotelladora de Coca-Cola en México y después inauguró dos plantas embotelladoras más en Matamoros y Nuevo Laredo.
Aunque no se trataba solo de expandir las operaciones: Topo Chico amplió los límites al lanzar nuevas bebidas de sabores como Ginger Ale Topo Club, Topo Chico Toronja, Topo Chico Gota de Limón y Topo Chico Sangría.
Estas bebidas, junto al sabor único de la marca, ayudaron a hacer de Topo Chico un alimento básico en México y entre las comunidades latinas en Estados Unidos, especialmente en Texas, donde se hizo tremendamente popular entre los cantineros.
Como mexicano, estoy orgulloso de las raíces de Topo Chico y de cómo se ha mantenido fiel a su herencia. La historia de la marca y los mitos vinculados a sus orígenes son testimonio de su autenticidad. Su sabor único no se parece a ninguna otra agua con gas. Nada la iguala para saciar la sed en un día caluroso.
A principios de la década de 2000, Topo Chico se fusionó con otros dos grupos embotelladores para formar Embotelladora ARCA S.A., convirtiéndose en el segundo embotellador de Coca-Cola más grande de México. En 2017, The Coca-Cola Company adquirió Topo Chico y llevó la marca a nuevas alturas. La convirtió en un nombre familiar en todo el mundo.
Topo Chico es más que una marca de agua con gas. Para mí, es un símbolo de la tenacidad y el trabajo duro del pueblo mexicano. Estoy orgulloso de haber crecido con ella y sé que su popularidad seguirá creciendo a medida que más y más personas descubran su sabor único y su historia auténtica. ¡Viva Topo Chico!